
Psicólogo infantil en Viladecans experto en TDAH
En mi trayectoria en PsicoVila he acompañado a muchas familias que llegan con la sensación de estar viviendo un torbellino cotidiano: deberes que no avanzan, enfados que surgen de la nada, despistes constantes, impulsividad que afecta a las relaciones…
Y, junto a todo eso, un denominador común: la duda.
Duda sobre si lo que observan en su hijo o hija es normal, duda sobre si es una etapa, duda sobre si están haciendo algo mal.
Mi intención con este artículo es aportarte claridad y serenidad. Como psicólogo infantil en Viladecans experto en TDAH, he comprobado que cuando la familia comprende qué está pasando —sin juicios, sin etiquetas precipitadas— todo empieza a colocarse con más suavidad.
Preguntas frecuentes sobre TDAH en la infancia
1. ¿A qué edad se puede identificar el TDAH?
Generalmente, las señales más claras empiezan a observarse entre los 4 y 6 años, cuando aumenta la demanda de autocontrol, organización y atención sostenida. Sin embargo, no es raro que ciertos indicadores aparezcan antes, especialmente si el niño o niña tiene un temperamento muy activo o impulsivo.
Aun así, el diagnóstico formal suele realizarse a partir de los 6-7 años, cuando se puede diferenciar mejor entre desarrollo típico y dificultades persistentes.
2. ¿Es normal que mi hijo o hija tenga días muy buenos y días muy malos?
Sí, es completamente normal. La variabilidad del rendimiento es una característica habitual en el TDAH. Hay días en que pueden concentrarse bien y otros en los que todo se vuelve más difícil.
Como psicólogo infantil en Viladecans experto en TDAH, suelo explicar que esta fluctuación no implica falta de interés, sino una diferencia en la regulación neurológica.
3. ¿Cómo saber si la inquietud de mi hijo o hija es TDAH o simplemente parte de su personalidad?
Esta es una de las dudas más comunes.
Para distinguirlo observamos tres elementos:
– Persistencia: ¿ocurre desde hace meses o años?
– Intensidad: ¿afecta al bienestar familiar, social o escolar?
– Contexto: ¿se repite en casa, en el colegio y en otras actividades?
Si la respuesta es afirmativa, conviene realizar una valoración profesional.
4. ¿El TDAH se puede “curar”?
No es una enfermedad, por lo tanto no se “cura”. El TDAH es una condición del neurodesarrollo, pero sí se puede aprender a gestionarlo muy bien con estrategias adecuadas, acompañamiento emocional, apoyo escolar y, en algunos casos, tratamiento médico.
Muchos niños y niñas crecen convirtiendo sus retos en fortalezas.
5. ¿El tratamiento siempre implica medicación?
No. La medicación puede ser útil en algunos casos, pero nunca es la única vía ni es obligatoria. En mi práctica como psicólogo infantil en Viladecans experto en TDAH, trabajo con programas de intervención psicológica, entrenamiento en funciones ejecutivas, técnicas de regulación emocional, orientación familiar y coordinación escolar. La decisión sobre medicación siempre debe hacerse con un especialista médico y de forma consensuada.
6. ¿El TDAH afecta a la autoestima?
Puede hacerlo, especialmente si el niño o niña recibe constantemente mensajes negativos, comparaciones o castigos. Por eso es tan importante intervenir pronto, trabajar la autoestima, reforzar sus capacidades y enseñar herramientas reales para gestionar su día a día.
7. ¿Puede confundirse el TDAH con un trastorno de aprendizaje o ansiedad?
Sí, y de hecho es muy habitual. Un niño con ansiedad puede parecer distraído; uno con dificultades lectoras puede parecer desmotivado; uno con alta sensibilidad puede saturarse emocionalmente y reaccionar de manera impulsiva. Por eso realizo siempre evaluaciones completas y personalizadas.
8. ¿Cómo puedo apoyar a mi hijo o hija desde casa?
Algunas pautas que suelo recomendar:
– Mantener rutinas claras y visuales.
– Dar instrucciones de uno o dos pasos, no largas secuencias.
– Fomentar momentos de calma diaria.
– Validar emociones antes de corregir conducta.
– Reconocer los esfuerzos, no solo los resultados.
– Evitar comparaciones y etiquetas.
La familia es una parte esencial del éxito terapéutico.
9. ¿El TDAH desaparece en la adolescencia?
No desaparece, pero evoluciona. Muchos adolescentes aprenden a regular mejor su impulsividad, mientras que las dificultades de atención suelen mantenerse. Con acompañamiento sostenido, pueden desarrollar una vida completamente autónoma y satisfactoria.
10. ¿Cuándo debería pedir una valoración profesional?
Cuando la duda te acompaña cada día. Cuando observas malestar en tu hijo o hija. Cuando ves que la frustración aumenta. Cuando notas que la convivencia se complica. O simplemente cuando necesitas claridad.
Comprender el TDAH desde una mirada tranquila y respetuosa
Antes de hablar de señales, me gusta explicar qué es realmente el TDAH.
Se trata de un trastorno del neurodesarrollo que afecta a funciones como la atención, la regulación de la impulsividad y la gestión del movimiento corporal. Pero no es un trastorno de mala conducta.
Lo repito con frecuencia:
El TDAH no tiene que ver con la voluntad. Tiene que ver con la neurología.
Desde mi experiencia como psicólogo infantil en Viladecans experto en TDAH, observo que muchos niños y niñas llegan a creer que “les pasa algo malo”, cuando en realidad lo que necesitan es acompañamiento, comprensión, y herramientas que encajen con su manera de procesar el mundo.
Además, es importante recordar que el TDAH no es igual en todos:
– Algunos muestran sobre todo inatención.
– Otros impulsividad.
– Otros hiperactividad.
– Y muchos, una mezcla variable de las tres.
Comprender estas diferencias es clave para un acompañamiento adecuado.
Señales tempranas: lo que suelo observar en consulta
A continuación encontrarás señales que, como profesional, observo con mucha frecuencia. No significa que si tu hijo o hija presenta una, dos o tres, tenga TDAH. Significa que conviene mirar con atención, sin alarmarse.
La atención “rápida”, cambiante, fugaz
Muchos padres describen que su hijo o hija parece estar escuchando… pero no termina de registrar lo que se le dice.
Ponen un ejemplo típico en consulta:
—“Le digo que se ponga los zapatos, que coja la botella y que prepare la mochila. Va a su habitación… y vuelve con un dinosaurio en la mano.”
Como psicólogo infantil en Viladecans experto en TDAH, sé que esto no es falta de interés, sino dificultad para sostener la atención en secuencias de varios pasos, especialmente si no son estimulantes para ellos.
Movimiento constante, a veces incluso necesario
No se trata solo de correr o saltar. En ocasiones el movimiento es más sutil: mover las piernas sin parar, tocar objetos, cambiar de postura…
Muchos necesitan sentir su cuerpo en acción para poder concentrarse.
He observado que cuando les permitimos moverse de forma regulada —no prohibiendo el movimiento, sino canalizándolo— su nivel de bienestar mejora.
Impulsividad emocional y verbal
Responder sin pensar, interrumpir, hablar por encima, actuar antes de evaluar consecuencias…
La impulsividad es uno de los aspectos más difíciles para la familia porque puede generar tensiones y malentendidos.
Pero cuando se comprende la raíz neurológica, se acompaña de otra manera: más desde la guía, menos desde el castigo.
Organización “caótica”
Mochilas desordenadas, habitaciones que cambian del orden al caos en segundos, tareas que se olvidan, materiales extraviados…
Las funciones ejecutivas —organizar, priorizar, anticipar— necesitan más tiempo y entrenamiento.
Emociones intensas, difíciles de regular
Este rasgo es uno de los menos conocidos, pero más frecuentes.
Hay niños y niñas con TDAH que sienten todo muy fuerte: la alegría, la frustración, la sorpresa, la rabia.
Como psicólogo infantil en Viladecans experto en TDAH, observo que esta sensibilidad emocional puede transformarse en una fortaleza enorme cuando se acompaña bien.
Variabilidad del rendimiento
Hay días en los que parecen “otro niño”: se centran, avanzan, participan.
Y otros en los que nada funciona.
Las familias suelen interpretar esta variabilidad como falta de motivación o de disciplina, pero en realidad forma parte de la fluctuación atencional propia del TDAH.
Dificultad para acabar lo que empiezan
Empiezan con entusiasmo y se quedan a medias.
Esto sucede con deberes, manualidades, juegos o incluso tareas cotidianas. No es dejadez; es un reto en el mantenimiento del esfuerzo.
Bajo umbral de frustración
Se sienten desbordados con facilidad y pueden llegar a pensar que “no les sale nada bien”.
Este pensamiento es muy común y por eso la intervención temprana es tan importante.
Señales que suelen confundir a las familias
Algunas señales pueden parecer TDAH, pero no lo son, y viceversa. Por ejemplo:
– Moverse mucho no implica TDAH; puede ser temperamento alto en actividad.
– Soñar despierto no siempre es inatención; a veces es creatividad.
– Hiperfoco (estar muy concentrado en algo que les interesa) no es contradicción; es parte del TDAH.
– Hablar mucho no siempre es impulsividad; puede ser entusiasmo, necesidad de socializar o extraversión.
Por eso la observación profesional es tan importante.
¿Cómo distingo en consulta si puede haber TDAH?
Antes de avanzar hacia una evaluación, observo tres criterios fundamentales:
Persistencia
Los comportamientos deben estar presentes durante al menos seis meses.
Intensidad
Deben afectar significativamente a su bienestar, rendimiento o relaciones.
Generalización
No basta con que ocurra solo en casa o solo en el colegio: debe aparecer en al menos dos ámbitos.
Estos criterios son esenciales y evitan diagnósticos precipitados.
Mi forma de trabajar con niños, niñas y familias en PsicoVila
Mi enfoque está basado en la calma, la observación y el respeto profundo por cada infancia. Intento que todas las familias salgan de cada sesión con más claridad y menos carga emocional.
Evaluación completa y personalizada
Incluye: entrevistas familiares, pruebas psicopedagógicas, cuestionarios específicos, observación del juego y análisis del entorno escolar.
No evalúo solo síntomas: evalúo a la persona.
Intervención centrada en fortalezas
No trabajo desde lo que “falta”, sino desde lo que “ya está” y puede ampliarse. Entrenamos la atención, la regulación emocional, la flexibilidad cognitiva, las funciones ejecutivas…
Acompañamiento emocional profundo
El niño o la niña necesita sentirse comprendido, escuchado y validado. Sin esto, ninguna estrategia funciona.
Trabajo con las familias
Les enseño herramientas de comunicación, maneras de establecer límites sin tensión, estrategias para mejorar rutinas… La familia es el pilar central de la intervención.
Coordinación con escuelas
Entender al alumno es básico para que el colegio pueda adaptar expectativas y metodologías. Pequeños ajustes hacen enormes diferencias.
Como psicólogo infantil en Viladecans experto en TDAH, siempre trabajo en red para que el menor tenga un entorno coherente, estable y comprensivo.
Psicólogo infantil experto en TDAH en Viladecans
Si al leer estas líneas has sentido que alguna de estas señales te recuerda a tu hijo o hija, quiero transmitirte algo muy importante: no estás sola, no estás solo.
La crianza ya es suficientemente desafiante como para vivirla acompañada de dudas o culpa.
Desde mi experiencia como psicólogo infantil en Viladecans experto en TDAH, puedo ayudarte a comprender qué está ocurriendo y ofrecerte un acompañamiento respetuoso, claro y lleno de herramientas prácticas para el día a día.
Si lo deseas, puedes agendar una cita conmigo en PsicoVila.
Estaré encantado de acompañarte a ti y a tu hijo o hija en este camino hacia una vida familiar más calmada, consciente y armoniosa.
Preguntas frecuentes II
1. ¿Qué tipo de terapia ofrece Guillem para el TDAH infantil?
Guillem ofrece una intervención integradora basada en la evidencia, combinando terapia cognitivo-conductual, entrenamiento en funciones ejecutivas, reeducación emocional, y orientación familiar. Su enfoque prioriza el desarrollo de habilidades prácticas que el niño o niña pueda utilizar en su día a día: autocontrol, organización, autorregulación emocional, planificación y gestión del tiempo.
Además, pone especial atención en fortalecer la autoestima y el vínculo familiar.
2. ¿Trabaja directamente con el colegio?
Guillem considera la coordinación escolar una parte esencial del tratamiento del TDAH infantil. Cuando las familias lo autorizan, mantiene contacto con el tutor o el orientador para facilitar adaptaciones, seguimiento, estrategias para el aula y coherencia educativa.
3. ¿La terapia incluye orientación para padres y madres?
Siempre. Guillem entiende que el éxito del proceso terapéutico depende en gran parte del acompañamiento familiar. Por eso dedica parte de las sesiones —o sesiones específicas cuando es necesario— a orientar a los adultos en pautas, límites, comunicación, rutinas, refuerzos y gestión emocional.
4. ¿Cuánto dura cada sesión?
Las sesiones individuales con el niño o niña suelen tener una duración aproximada de 45 minutos. En algunos casos, si se requiere orientación familiar, la sesión puede extenderse hasta 60 minutos.
5. ¿Con qué frecuencia recomienda asistir?
Para el trabajo con niños y niñas con TDAH, Guillem recomienda iniciar con una frecuencia semanal, especialmente en las primeras fases del tratamiento. Más adelante, según la evolución, se puede pasar a sesiones quincenales para mantener y reforzar los avances.
6. ¿Cuál es el precio de las sesiones?
El precio habitual de una sesión individual con Guillem es de 65€. En los casos en que se requiere un informe psicológico, su coste se acuerda de forma personalizada.
7. ¿Guillem realiza evaluaciones diagnósticas de TDAH?
Sí. Guillem realiza evaluaciones completas que incluyen entrevistas, pruebas psicométricas, cuestionarios para familia y escuela, y análisis funcional del comportamiento. El objetivo es ofrecer un diagnóstico claro, responsable y comprensible para las familias.
8. ¿Cuánto tiempo suele durar el proceso terapéutico?
Depende de cada niño o niña, pero en general los procesos por TDAH suelen durar entre 6 meses y 1 año, con revisiones periódicas. En casos más complejos, el acompañamiento puede extenderse, ajustándose siempre al ritmo y necesidades del menor.
9. ¿Cómo puede una familia saber si la terapia está funcionando?
Guillem realiza seguimientos continuos y establece objetivos concretos y medibles con las familias: reducción de impulsividad, mayor capacidad para seguir rutinas, mejora en el rendimiento escolar, mejor regulación emocional o disminución de conflictos familiares. La evolución se revisa regularmente con los padres para asegurar que el tratamiento avanza en la dirección adecuada.
RESERVAS: https://app.lapsula.com/book/PSICOVILA
☎️ +34 930 47 40 26
📧 info@psicologoviladecans.es
📌 Carrer de Sant Marià, 92, DESPACHO 2. 08840 Viladecans, Barcelona.

El estilo de trabajo de Guillem
Descubre a Guillem
Guillem Jubany Garrote, Psicólogo y Neuripsicólogo
Hola, soy Guillem. Soy psicólogo y neuropsicólogo.
Como neuropsicólogo, abordo cada caso desde una evaluación rigurosa y personalizada, especialmente en diagnósticos de TDAH, TEA y altas capacidades. Mi objetivo es comprender el perfil cognitivo, emocional y conductual de cada persona para ofrecer una intervención ajustada a sus necesidades reales.
Tras el proceso diagnóstico, desarrollo sesiones de intervención neuropsicológica centradas en fortalecer las funciones cognitivas afectadas. Utilizo programas de entrenamiento cognitivo y enseño técnicas prácticas que facilitan la mejora del rendimiento académico, laboral y del día a día.
Finalizando mi Máster en Psicología General Sanitaria.